El concepto supergrupo ha estado unido al rock desde finales de la década de los 60, consistiendo en la unión de reputados músicos bajo un mismo nombre. Se considera a los británicos Cream como el primer supergrupo dentro del rock, ya que en él militaban Eric Clapton, Jack Bruce y Ginger Baker -no creo que sea necesario recordar la categoría de estos tres músicos. Desde entonces y en todas las décadas hasta la actualidad han surgido supergrupos. Algunos de estos fueron, en los 60, los propios Cream y The Dirty Mac, compuesto por John Lennon, Eric Clapton, Keith Richards y Mitch Mitchell1. En la década de los 70 tenemos a Emerson, Lake & Palmer (ELP para los amigos) o a Toto, compuesto por Jeff Porcaro, David Paich, Steve Lukather y David Hungate (eran sobre todo músicos de sesión muy reputados, los tres primeros habían trabajado para Michael Jackson). Ya en los 80 contaríamos con Asia, compuesto por Geoff Downes, Stewe Howe, John Wetton y Carl Palmer (los dos primeros miembros de Yes, Wetton de King Crimson y Palmer la P de ELP). En la década de los 90 aparecerían supergrupos como Fantomas2 -que en sus filas contaba con Mike Patton (Faith No More), Buzz Osborne (The Melvins), Dave Lombardo (Slayer) y Trevor Dunn (Mr. Bungle)- o Temple Of The Dog, con Chris Cornell, Eddie Vedder, Stone Gossard, Jeff Ament, Mick McCready y Matt Cameron (en resumen, una especie de unión entre Soundgarden y Pearl Jam). A partir del año 2000 como representantes del fenómeno tenemos a Chickenfoot -formado por Sammy Hagar y Michael Anthony de Van Halen, Joe Satriani y Chad Smith de los californianos Red Hot Chilli Peppers- o a los protagonistas de esta entrada, Them Crooked Vultures.

En el año 2005 en una entrevista para la revista Mojo, Dave Grohl afirmó que estaba intentando poner en marcha un nuevo proyecto con John Paul Jones al bajo, Josh Homme a la guitarra y él mismo a la batería. Pasaron 3 años hasta que se volvió a tener noticias de la banda que tenía en la cabeza Grohl, con la confirmación de que se habían reunido y estaban preparando un disco. Incluso hubo conversaciones para que Jimmy Page se uniera a la formación, confirmado por el propio guitarrista inglés en sus redes sociales. Para finales de 2008 las situaciones de cada miembro de la banda eran las siguientes. Dave Grohl venía de publicar el año anterior el sexto disco con Foo Fighters, “Echoes, Silence, Patience & Grace”. John Paul Jones había participado en la deseada reunión de Led Zeppelin en el O2 londinense en 2007, registrada en el disco “Celebration Day”3 de 2012. Josh Homme, por su parte, estaba en un merecido descanso tras la última gira de Queens Of The Stone Age. Al estar los 3 miembros libres se pudieron juntar y empezar a componer el disco con el que darían a conocer a la nueva agrupación. Dave Grohl y John Paul Jones ya se conocían personalmente, dado que tanto Jones como Jimmy Page participaron como invitados en el concierto de Foo Fighters en Wembley en 2008, donde interpretaron “Ramble On” de Led Zeppelin. Por otro lado, Grohl y Homme tenían una larga amistad, ya que tocaron juntos en Queens Of The Stone Age. De aquella unión surgió el mejor álbum de dicha banda, “Songs For The Deaf”, posiblemente uno de los mejores discos de la primera década del nuevo siglo. En 2009 se empezaron a conocer detalles de la banda como el nombre de la misma, y en agosto arrancó la campaña de promoción del disco. Este finalmente saldría a la venta el 16 de noviembre siendo homónimo.

El álbum estaba compuesto de 13 canciones con una duración de 66 minutos de puro rock. El primer sencillo fue “New Fang”, seguido de “Mind Eraser, No Chaser”. La semana previa al lanzamiento del disco se pudo escuchar por completo en el canal de Youtube de la banda. Alcanzó el puesto 12 del Billboard 200, llegando a vender 70000 copias en Estados Unidos en la primera semana. El disco empezaría con la demoledora “No One Loves Me & Neither Do I”, donde se hace imposible no seguir el ritmo de la canción a la mitad del tema. Llegando al ecuador del disco, aparecería “Elephants”, para mí el mejor tema del álbum, con un comienzo épico a cargo de Josh Homme con un riff de guitarra que, llegado el momento, es interpretado a más velocidad, proporcionando al tema una sensación de vértigo. Resulta gracioso ver como Homme en la letra de la canción cuela un par de frases en castellano, sonando parecido a cuando lo hacían The Clash4. Hacia el final del disco nos encontraríamos con “Warsaw Or The First Breath You Take After You Give Up”, otro de los grandes temas de este. Se trata de un tema a medio tiempo bastante tranquilo en apariencia pero, a medida que se aproxima al final, entra en terrenos de la experimentación y la psicodelia con una parte instrumental muy original. Después de lanzar el disco, se embarcaron en una gira de presentación que se extendería hasta 2010 por Estados Unidos y Europa. Una vez finalizada la gira, no volvieron a actuar salvo en contadas ocasiones, la más reciente en 2022 en el concierto tributo a Taylor Hawkins en Wembley, donde interpretaron tres temas: “Goodbye Yellow Brick Road” de Elton John, “Long Slow Goodbye” de Queens Of The Stone Age y su propio “Gunman”.

Para finalizar y hacer un poco menos larga la espera a su segundo disco, si es que alguna vez llega, os dejamos unos vínculos para que podáis descubrir esta pequeña joya oculta del rock del siglo XXI.

 

1 The Dirty Mac se creó exprofeso para la película y disco “The Rolling Stones Rock And Roll Circus”. En ella aparecen The Who, Jethro Tull, Marianne Faithfull y los propios Stones, además de The Dirty Mac. El proyecto fue concebido inicialmente por Mick Jagger como una forma de promoción de los discos y bandas que actuaron en él.

2 Como recomendación personal escuchad el disco “The Director’s Cut”, que consiste en versiones de banda sonoras de películas y series de terror con un sonido muy personal. No suele ser un disco que deje indiferente al oyente tras su primera escucha, para bien o para mal.

3 A pesar de no ser la formación original de Led Zeppelin (John Bonham estaría orgulloso de la actuación de su hijo a la batería), este disco es una gran oportunidad de escuchar los mejores temas de la banda con sonido moderno.

4 El mejor ejemplo de las particularidades del castellano empleado por The Clash es su tema “Spanish Bombs”, más concretamente en el estribillo la frase “Yo te quiero infinito”.

Deja un comentario

ULTIMAS ENTRADAS

A %d blogueros les gusta esto: